Convivencia vocacional de octubre 2011

Durante los días 22 y 23 de octubre se celebró la primera convivencia del Centro de Orientación Vocacional “Manuel Aranda” de este curso 2011/12 en el Seminario Menor “San Juan de Ávila”.

La convivencia estuvo organizada por los Seminarios Mayor y Menor, y coordinada por D. José Mª Romero.

Asistieron jóvenes de Sabiote, Torreperogil, Higuera de Calatrava, Villanueva del Arzobispo y los alumnos del Seminario Menor; en total 19 jóvenes.

En estos días los temas principales fueron la reflexión sobre la Vocación de Samuel y el Proyecto Personal de Vida.

La convivencia empezó con la acogida en el Seminario Menor el 22 de octubre a las 10:30 de la mañana; acto seguido se hizo una oración.

En primer lugar, se presentó el tema de la Vocación del profeta Samuel, y tras una reflexión personal y un pequeño descanso se pasó a enseñar cómo se hace el Proyecto Personal de Vida. Después cada uno elaboró su propio proyecto para el presente curso 2011/12. Esto tiene como fin ponerse unas metas en diversos aspectos de la vida cristiana (familia, Dios, estudios, amigos y tiempo libre).

Tras la elaboración del proyecto de vida hubo tiempo libre, continuando con la comida en el Seminario Mayor. Después, los jóvenes hicieron deporte, como jugar al fútbol.

La tarde empezó con la revisión del Proyecto Personal de Vida por varios sacerdotes: D. José María Romero, rector del Seminario Menor; D. Agustín Rodríguez, vicerrector del Seminario Menor; y D. Manuel Peña, confesor del Seminario Menor.

Tras la revisión se pasó a la presentación de los seminaristas en familia.

Al finalizar la merienda, los jóvenes tuvieron una reunión con los seminaristas en familia para conocerlos y preguntarles sobre su vida y amistad con Jesús.

El momento central de la tarde fue en la Catedral con la celebración de la Santa Misa de acción de gracias por la beatificación de nuestro querido Papa Juan Pablo II. La Eucaristía estuvo presidida por nuestro Obispo, D. Ramón del Hoyo López.

Tras la celebración, los jóvenes pudieron besar la reliquia de un trozo de fajín que usó el Papa Juan Pablo II en su Pontificado.

Cuando terminó la Eucaristía nos dirigimos al Seminario para cenar, y más tarde ver una película todos juntos en el Seminario Mayor.

Finalmente, la jornada terminó con la Oración de la noche en la Capilla del Seminario Menor.

El domingo 23 de octubre, comenzamos el día con un taller de oración sobre el lavatorio de los pies de la última cena, y, acto seguido, con la celebración de la Eucaristía en el Seminario Menor.

La convivencia se clausuró después del desayuno, en torno a las 10 de la mañana.

Desde aquí no nos cansamos de seguir invitando a jóvenes a descubrir lo que Jesús quiere verdaderamente de ellos, participando en la próxima convivencia vocacional.

Pepe Navarrete.

Encuentro de seminaristas menores de Andalucía

Los días 11 y 12 de octubre tuvimos un encuentro en Granada con los seminaristas menores de Andalucía en las que participaron: El Seminario Menor de Granada, el Seminario Menor de Córdoba y nuestro Seminario Menor de Jaén. En esos días, El Seminario Menor de Granada nos enseñó sus instalaciones además de su Catedral Metropolitana. También escuchamos unos testimonios acerca de cómo el Señor entró en la vida de algunos seminaristas mayores de Granada. El Seminario Menor de Jaén aportó unas actividades deportivas (gymkana) para pasar un buen rato con los demás seminaristas. En general, fue un fin de semana inolvidable y muy gratificante para todos, pues pudimos conocer la vida de otros seminaristas menores y vivir esos días en comunidad frente al Señor.

José Miguel Espinosa

¿Quiénes son los seminaristas menores? Presentación de Jesús Cristóbal

Hola, soy Jesús Cristóbal, tengo 16 años y vengo de Noalejo. El Seminario Menor lo formamos once jóvenes: seis de Noalejo, uno de Marmolejo, uno de Jabalquinto, uno de Villacarrillo, uno de la Iruela y otro de Sabiote.

Yo entré al Seminario Menor gracias a mi párroco que me habló de lo que era y lo que se hacía en un Seminario Menor, aunque anteriormente él nos había llevado a mí y a mis compañeros a convivencias vocacionales y de monaguillos.

Una de las razones por las que yo quise pasar a ser seminarista fue el querer experimentar una vida más cercana a Dios y aprender verdaderamente a orar. Nuestros tres pilares básicos son el estudio, la oración y la formación humana y vocacional. Esto se debe a que se busca nuestro crecimiento como cristianos, pero debido a nuestras edades también nos ayudan a crecer como personas, siendo más responsables y respetuosos con los demás creándonos una personalidad propia, a la vez que reflexionamos sobre lo que Dios quiere de cada uno de nosotros, ya que eso será lo que nos haga más felices en un futuro.

Desde que estoy en el Seminario he aprendido a valorar lo que tengo mucho más y me han enseñado valores esenciales para la vida como la responsabilidad, el compañerismo y muchos otros tan necesarios en la sociedad actual.

Ya que me conocéis querría pediros que oréis por las vocaciones, pero especialmente por las semillas de vocación que hay en los jóvenes, para que sean valientes con lo que Dios les pida y descubran la misión que Él les encomienda.

Gracias por todo!!! Aquí os esperamos!!!

Confirmación de Agustín Barragán

Mi confirmación tuvo lugar el día 7 de octubre del 2011, a las 20:30 horas, una fecha inolvidable para mí. He estado muchos años preparándome para este sacramento acudiendo a la catequesis, conociendo como es Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo. Me enriquecía cada vez más de la Palabra del Señor, queriéndolo de una manera especial, como si fuera mi mejor amigo en quien podía confiar siempre en Él.

Cuando estaba preparado para recibir este sacramento, sabía que iba a recibir a Alguien muy grande que nunca hubiera experimentado. El Espíritu Santo del Señor iba a entrar en mi interior. Era algo que se te ponía la piel de gallina nada más que pensar en eso.

Me he estado preparando un año antes de mi Confirmación, mi espíritu y mi cuerpo a la hora de que el Espíritu del Señor entrase en mí. Me sentía motivado totalmente, y sabía ciertamente que quería recibir ese sacramento, porque me iba a ayudar en mi día a día el hecho de que Dios entrara en mi ser.

Llegó el momento de mi Confirmación, un día de los más esperados de mi vida. La celebración la realizó el Vicario de Evangelización, D. Francisco Rosales, acompañado también de mi párroco D. Ángel, y mi rector D. José María. La eucaristía tomó su curso muy bien, hasta que llegó el momento esperado. Hicimos renovación de nuestra fe en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, y en la Santa Madre Iglesia.

Después comenzó el acto de la imposición de manos en la cabeza de los que íbamos a ser confirmados. Ese fue el momento más tenso de mi vida. Cuando el Vicario me impuso sus manos sobre mi cabeza invocando al Espíritu Santo, sentí una fuerza muy grande en mi interior, fueron dos o tres segundos, pero me reconforté y sentía que Dios estaba ahora más que nunca dentro de mí. 

Creo que Dios me dio la señal más significativa de toda mi vida, pues esa imposición de manos me abrió bien los ojos, sabía qué futuro tenía mi vida y es el de enseñar a quien más lo necesite la Palabra de nuestro Señor. No me he equivocado al ingresar en el Seminario Menor, y doy fe con toda sinceridad de que Dios existe y que está entre nosotros, y que nos ayuda a realizar todas las acciones que realizamos para el bien de los demás.

Mi confirmación en general, es una llamada de Dios en la que ahora sé que Él está conmigo y que siempre me acompañará, porque nunca nos deja solos.

¡NO TENGAIS MIEDO a abrir vuestro corazón a Cristo, porque Él es luz en nuestra senda cuando nosotros estamos perdidos!

Agustín Barragán.

Despedida a D. Jesús Diez del Corral y a Pepe Navarrete

Empezaré presentándolos para los que no sepais quiénes son.

D. Jesús era el anterior Superior de nuestro Seminario Menor. Este año nos ha tenido que dejar porque ha sido trasladado a otra parrroquia y Pepe era un seminarista menor, ex-compañero nuestro, que este año ha ingresado en el Seminario Mayor. Por estos motivos los seminaristas menores y sus superiores decidimos realizar una pequeña despedida.

El día 11 de octubre en un almuerzo al mediodía los invitamos a comer con nosotros. En dicha comida compartimos momentos muy buenos de charlas y risas sobre sus experiencias del año pasado (en especial con sus antiguos compañeros) pero tambien con los nuevos seminaristas, para los cuales el testimonio de Pepe, las cosas que nos contó, nos sirvió de gran ayuda para la experiencia en la que nos hemos embarcado este año. Los discursos de los seminaristas y del Rector dicen mucho de la amistad que reina entre nosotros, y los regalos que recibieron son una muestra de lo mucho que los queremos.

Aunque los conozco de muy poco y he convivido en escasas ocasiones con ellos, puedo decir que me han demostrado ser unas excelentísimas personas y de un gran saber estar tanto de risas como en charlas más formales.

Para finalizar, nuestros mejores deseos para los dos de parte de todo el Seminario Menor, por una parte Pepe, para que sigas con esta aventura en la que comienzas este año y lleves tu vocacion también con buen fin como hasta ahora; y D. Jesús, que en tu nueva Parroquia te siga iluminando el Señor y la Virgen, y no te olvides de nosotros, aunque nos hayas dejado un poco, tu nueva misión es más importante y ¡qué suerte tiene tu nueva Parroquia de la gran persona que tienen! Mucho ánimo a los dos y suerte de corazón.

Antonio Troya.

Inauguración del curso

En el pasado día 1 de octubre todos los seminaristas, mayores y menores, junto con el Centro de Formación Cristiana San Pedro Pascual y muchas otras personas, sobre todo miembros de nuestra familia, asistieron a la inauguración del curso de dichos Centros académicos.

La Eucaristía de apertura comenzó a las 11:00 de la mañana; la celebró el Excmo. Rvdmo. Sr. D. Ramón del Hoyo López, Obispo de Jaén, concelebrando los rectores y formadores del Seminario Mayor y Menor de Jaén, el Rector de la Facultad de Teología de la Cartuja de Granada y un abundante número de sacerdotes diocesanos.

Durante la lectura de las memorias del curso pasado, se informó sobre los objetivos logrados, los cambios planteados y los objetivos que se trazan para este curso en las instituciones anteriormente nombradas.

Seguidamente, al acabar de enunciar esta información se continuó con la lección inaugural de D. Juan Jesús Cañete Olmedo, Licenciado en Filosofía, Jefe de Estudios y profesor del Seminario Mayor, cuyo tema principal y título fue: “La ciencia, Dios y la materia”.

Finalmente, la inauguración del curso concluyó con una copa de vino, presidida por el Sr. Obispo de Jaén.

http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=I6gPntnO0rcJesús Cristóbal Martínez.